¿El lavado de coches a vapor daña la pintura?
No, los acabados de los vehículos son altamente resistentes a la temperatura y deben soportar el frío y el calor extremo. El vapor es una forma de gas que una vez expuesta a la atmósfera la temperatura de vapor desciende rápidamente. En general el vapor que toque la superficie no alcanza a los 100°C. Siempre mantenemos una distancia de unos 2 – 3 centímetros entre la boquilla de pistola a vapor y la superficie del coche. La presión de vapor viene predefinida a 8 bares (116 psi), es una presión relativamente baja, pero de gran alcance y suficiente para limpiar diversas superficies de forma segura y eficiente. La alta presión de los lavados convencionales pueden dañar la pintura con mucha más frecuencia una vez la pintura esté dañada.